sábado, 28 de agosto de 2010

Aperitivo de leitura





Isabel Allendi escreve. E como escreve. Ao tomar conhecimento no início deste ano de seu novo romance, indaguei a mim mesma: por que será que ela escolheu este tema, aparentemente tão batido, em pleno século XXI ?. Ah ingenuidade a minha. Bastou ler as primeiras linhas da história de Zarité, uma escrava na Saint-Domingue dos finais do século XVIII, para eu ficar completamente fascinada.

O jornal El País disponibilizou o primeiro capítulo de La isla bajo el mar em pdf. Clique aqui para acessá-lo.

Abaixo, deixo vocês com o início da leitura.



Zarité


En mis cuarenta años, yo, Zarité Sedella, he tenido mejor suerte que
otras esclavas. Voy a vivir largamente y mi vejez será contenta porque
mi estrella —mi z’etoile— brilla también cuando la noche está nublada.
Conozco el gusto de estar con el hombre escogido por mi corazón cuando
sus manos grandes me despiertan la piel. He tenido cuatro hijos y un
nieto, y los que están vivos son libres. 

Mi primer recuerdo de felicidad, cuando
era una mocosa huesuda y desgreñada, es moverme al son de los tambores
y ésa es también mi más reciente felicidad, porque anoche estuve en
la plaza del Congo bailando y bailando, sin pensamientos en la cabeza, y
hoy mi cuerpo está caliente y cansado. 

La música es un viento que se lleva
los años, los recuerdos y el temor, ese animal agazapado que tengo adentro.
Con los tambores desaparece la Zarité de todos los días y vuelvo a ser
la niña que danzaba cuando apenas sabía caminar. Golpeo el suelo con
las plantas de los pies y la vida me sube por las piernas, me recorre el esqueleto, se apodera de mí, me quita la desazón y me endulza la memoria. El
mundo se estremece. 

El ritmo nace en la isla bajo el mar, sacude la tierra,
me atraviesa como un relámpago y se va al cielo llevándose mis pesares
para que Papa Bondye los mastique, se los trague y me deje limpia y contenta.

Los tambores vencen al miedo. Los tambores son la herencia de mi
madre, la fuerza de Guinea que está en mi sangre.

Um comentário:

Katia Dias disse...

Querida Malu, que blog maravilhoso! E Isabel Allende, convenhamos, é genial! Li todos os seus livros (todos mesmo, isso inclui a coleção para adolescentes, mas a exceção sempre chega, não é mesmo? ...para o nosso deleite! rsrsrs. Vou checar com Izaura se já está na livraria... Deu água na boca! rsrsrs.